Compartir pantalla... ¿Si o no? (fatiga por Zoom - Volumen III)


 










Hoy escribe... Martín Lorences, integrante del Comité Ejecutivo del CEDELI

 

Sofia esta a por comenzar la tercera videoconferencia del día. En esta oportunidad, Pedro va a realizar su presentación. Le dan la palabra, el disertante coloca su fondo virtual institucional (se ve que todavía no había leído FATIGA POR ZOOM NIVEL II) y enarbola la frase mas escuchada en el mundo online:  - Les comparto pantalla!! ¿Se ve bien?

Lo que ocurre a continuación es bien sabido por todo aquel que tuvo que lidiar con estos encuentros. Un Power Point, con una primera diapositiva con el logo de la corporativo se adueña de la escena, al mismo tiempo que la imagen, el recuadro donde aparece el orador se va muy pequeño a un costado. De ahí en más, pueden pasar 20, 45, 60 o hasta 120 minutos donde el orador habla sin parar, muestra diapositiva tras diapositiva con texto, cifras o datos, y para colmo de males nunca hace contacto real con los asistentes.

Antes de la pandemia, en las antiguas reuniones presenciales, todo aquel que tuviera que realizar una presentación lo hacia con el Power Point como soporte visual. En realidad, lo que ocurría era que los oradores realizaban un “Word” proyectado. ¿Como? Si, colocaban gran parte del texto de la presentación para que todos lo puedan leer. En más casos de lo que me gustaría, el presentador se ponía a leer su presentación, incluso de espaldas a su público. RESULTADO: ¡Todos aburridos!   Este no es un párrafo de lapidaria critica al tan noble PPT, en realidad no es responsabilidad de la plataforma sino de quien la utiliza.

Frente a la pandemia y la consolidación de las videoconferencias como el lugar donde las reuniones de trabajo acontecen, tuve por unos pocos días, la ilusión de que las nuevas plataformas (Zoom, Meets, Teams) iban a impulsar la creatividad de los conferenciantes. Con suma tristeza, ocurrió lo peor que podía pasar. Esas presentaciones de PPT, que ya estaban caducas en el mundo PRE-pandemia, se vieron relanzadas al mundo online, bajo la frase premonitoria:  - “¿Comparto pantalla?”.   Las aburridas diapositivas llenas de texto, cifras y datos poco entendibles, lejos de fenecer en las videoconferencias, han tomado un protagonismo sin igual, ya que ahora ocupan casi la totalidad de la pantalla. Resultado parcial:

 Diapositivas aburridas 1 VS Presentaciones de impacto 0.

Es tiempo de la rebeldía. Si nos cansa, si nos aburre el tipo de videoconferencias a las que asistimos, ¿por qué cuando nos toca tener la oportunidad de hablar a nosotros, terminamos haciendo el mismo tipo de presentaciones poco creativas? ¿Por qué no tenemos el impulso de hacer cosas diferentes?

Después de escucharlo a Pedro, Sofia dijo BASTA. Inicio su camino de rebeldía ante presentaciones online aburridas:  - “ No quiero ser una más, quiero tener la oportunidad de motivar, inspirar e influir cada vez que realizo una presentación. Martin, ayúdame!”.    

Mi respuesta fue muy simple, tan minimalista como recomiendo que sean las presentaciones:  - “ VOS SOS TU PRESENTACION”.

¿Que obviedad no? Si, pero no viene mal tener presente lo que esta frase significa.

Ser tu presentación es asumir que sos VOS el PROTAGONISTA de tu aparición en público. Compartir pantalla, poner un video, mostrar algún gráfico, son elementos, herramientas que están a tu servicio, pero no pueden disputar contigo el protagonismo de tu charla.

Te cuento que cuatro recomendaciones le di a Sofia para que pueda hacer videoconferencias saludables, de impacto y que aseguren su protagonismo.

1-    ¿Compartir pantalla? Si, pero solo cuando sea necesario, teniendo en cuenta PARA QUE comparto y POR CUANTO tiempo lo hago. Te recomiendo compartir pantalla, mostrar lo que tengas que mostrar por poco tiempo y dejar de compartir. Vuelve siempre a ser vos el centro de tu aparición.

2-    POCO O NADA DE TEXTO.  Cuando compartas pantalla muestra imágenes, datos, estadísticas, que potencien y complementen a tus palabras. Hay veces que para abarcar en su totalidad a una idea, con las palabras solas no alcanzan. Si es muy pero muy necesario que coloques texto, que sea el mínimo posible. Te recomiendo que varíes el tamaño de la letra, resaltando las palabras mas importantes.

3-    UNA IDEA POR SLIDE.  Cada diapositiva que compartís debe consolidar una sola idea. No intentes explicar con una misma imagen mas de una idea. De hacer lo contrario, puedes abrumar a tu audiencia.

4-    NO LEAS LA PANTALLA. Una buena presentación, requiere de un orador que, con su voz genere matices, enfatice ideas, transmita su convencimiento. Si lees el texto de la diapositiva que vas a compartir, de seguro vas a generar una desconexión con tu público.

 

Cada ocasión que tenemos para hablar ante los demás, es una oportunidad para conectar nuestras ideas con otros. Inspirar y motivar se define en los pequeños detalles. No repitas el quehacer masivo. Haz de tus presentaciones, algo digno de ser admirado. Realiza la presentación que a vos te gustaría presenciar. 

Ser un orador de impacto esta al alcance de tu mano. No lo dejes ir.


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