CONVERSACIONES ORGANIZACIONALES


 







Hoy escribe...

RAUL VOLKER, integrante del Comité Ejecutivo del CEDELI


CONVERSACIONES ORGANIZACIONALES

La realidad de las organizaciones se nos presenta como sistemas adaptativos que transcurren mediados por conversaciones complejas entre los colaboradores, con los clientes o con el resto de los interesados por el éxito de la organización. Esas conversaciones, en definitiva, nos muestran claramente la estructura organizacional formal y hasta la informal, esa red vincular con la cual se están llevando adelante las actividades. En ese entramado de conversaciones complejas es donde ocurren la mayor parte de los conflictos como emergentes de nuestra incapacidad para dialogar adecuadamente.

Hoy más que nunca, las organizaciones deben comprender claramente las incertidumbres, ambigüedades y complejidades de la realidad; razón por la cual debieran direccionar sus objetivos y desarrollar estructuras más flexibles y agiles para lograr en sus culturas un cambio transformacional y nuevos dispositivos para la toma de decisiones.

Este es entonces, el contexto que se presenta como una oportunidad para que los equipos organizacionales actúen de forma explorativa y experimental en la búsqueda de la madurez y la autonomía. Un orden buscado en la autoorganización y en las múltiples interacciones e iteraciones de los equipos dentro de una estructura que sea capaz de dar respuesta a una realidad global crecientemente volátil, incierta, caótica, compleja y ambigua que ya no es plenamente planificable.

Liderar esos equipos en esta realidad, nos debe llevar al entendimiento de que tanto esa volatilidad, caoticidad y complejidad con que se nos presentan los eventos, son variables contextuales y emergentes del entramado de los acontecimientos donde la organización se desempeña; pero en ese mismo sentido, debemos comprender que tanto las incertidumbres y las ambigüedades, nos encuentran y condicionan como observadores subjetivos de esos acontecimientos de la realidad.

Este es el gran reto para el liderazgo organizacional: desarrollar el proceso comunicacional con una propuesta que logre estimular los talentos a formar parte de equipos motivados y comprometidos en una nueva dinámica para la optimización de logros y resultados superadores.

En este sentido, el diálogo es el recurso lingüístico para enriquecer y fortalecer las organizaciones en un dispositivo genuino que implica asertividad y conlleva una premisa central que consiste en cuidar permanentemente el vínculo que se estableció con el otro; haciendo conocer a ese otro nuestros pareceres, pero cuidando en todo momento de consagrar esa relación vincular como el principal bien a preservar.

Es imperativo entonces, desarrollar las conversaciones necesarias para lograr inspirar a los equipos hacia la búsqueda de un futuro deseado y desarrollar el entendimiento y la claridad suficientes para lograr tomar las mejores y más adecuadas decisiones.


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