Demostración en el hacer


 










Hoy escribe...

Carlos Guastavino, integrante del Comité Ejecutivo del CEDELI


Luego que un líder haya sido capaz de mostrar un nuevo ambiente, en función a estas opiniones, entendiendo a ambiente como una nueva manera de hacer, crear, transmitir, y todos aquellos verbos que se le ocurra al lector pero que transforma un estadio llevándolo a otro diferente, luego que haya logrado llevar a los posibles agentes de ese cambio de su “comfort zone” a ampliar su zona de credibilidad mediante la comunicación viene una etapa aún más compleja que es la demostración para la persuasión y logar que aquellos vectores aun poco alineados se formen para conseguir una unidad que pueda romper todas y cada una de las resistencias.

Esta etapa es la que diferencia definitivamente al líder del jefe, y haciendo un paralelismo con el arte de la pesca, es la de tomar la caña, ponerse las botas, engrasar el riel, buscar el señuelo, las grapas, las anillas, pinzas, cebadores, etc analizar el río, si tiene curva, si es torrentoso, si tiene peñascos, o remolinos, o arboles flotando, u otros competidores por la presa, etc y entrar primero para demostrar y persuadir sobre la capacidad de poder y empoderar al equipo. De ninguna manera se trata de llevar una pizarra y mostrar la teoría de la pesca y luego sentarse en la mesa con la servilleta esperando a que traigan la presa, es ir a buscarla, demostrar y compartir ese conocimiento, hacer expertos, formar pescadores para que luego podamos ir por un escalón mas alto, léase esto como un medio y no un fin en si mismo, valido para cualquier cosa que estamos desempeñando actualmente.

Debemos detenernos un momento en este punto, porque es muy habitual que luego de comprender la demostración del hacer nos quedemos haciendo siempre, seamos uno mas del equipo y claramente no somos uno más, dentro de la jerarquía del hacer del líder y llevándolo al plano de la administración, podríamos clasificarla en estrategia, táctica y operativa. El líder se manejará en todas ellas en su debido tiempo, la demostración del hacer, la persuasión, el cómo se hace, está en una jerarquía táctico-operativa que tiene componentes estratégicos y que sirven para el momento de demostrar acción, el momento del como se pesca. Luego, el líder saldrá de ese nivel y volverá al de la estrategia o gran estrategia para ver nuevas realidades que quizás eliminen la actual. Y esto se debe a que, en un mundo cambiante disruptivamente, debemos evitar ser la rana que se calienta en el agua de la fuente.

Entendemos que la única manera de evitar esto es enseñando el hacer a todo el equipo para que podamos ver y analizar otras opciones y no ser fanáticos aferrados a un árbol que quizás se muestra fuerte por fuera pero ya este seco por dentro y se nos puede caer encima.

Muchas veces hablo de la luz de las estrellas y nos ponemos a mirarlas en una noche limpia quedándonos maravillados y quizás sea la luz de una estrella que ya se ha extinguido millones de años antes.

Moraleja, no nos quedemos con nuestra realidad actual, creemos otras, comuniquemos, pero para hacerlas tangibles, demostremos que se pueden lograr.


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